"Esforzándose para alcanzar la libertad artística para su deseo creativo,
el hombre inventó el teatro de títeres.
A través de su descubrimiento se libera de la amenaza del destino,
creando para sí un mundo a su medida, y a través de sus personajes
fortalece su deseo, su lógica y su estética. En resumen, llega a ser un
pequeño dios en su propio mundo".
Vladimir Sokolov